Músicos y artístas en contra de Spotify

En este post vamos a hablar de un nuevo fenómeno en la industria musical: músicos y artistas en contra de de Spotify. El sistema de recaudación de la famosa empresa de música streaming crea controversia.

Muchos artistas de la industria musical ponen de manifiesto no estar de acuerdo con las condiciones de Spotify

La llegada de Spotify a nuestras vidas se presentó como el futuro y la revolución de la industria musical, y desde su aparición han pasado ya cinco años, tras los cuales muchos músicos se quejan de no ver ningún tipo de beneficios, y de condiciones poco transparentes y en ocasiones injustas.

Muchos de los grupos y artistas que incluyen sus temas confirman que le dinero que perciben por las escuchas de su música online vía streaming no les da para vivir. Aunque si se les pregunta sobre los beneficios de tener sus canciones disponibles en la plataforma Spotify, la respuestas es que prefieren que el usuario escuche sus temas de forma legal, y no recurran a la piratería.

Lo que parecía una idea perfecta al principio para los usuarios, desde hace un tiempo comienza a tener desventajas, ya que Spotify ha aumentado la publicidad con mayor frecuencia entre canción y canción, y desde hace ya algún tiempo, tan solo los usuarios de pago tienen un acceso ilimitado a escuchar música. Por otra parte, los servicios que ofrece a los artistas sigue teniendo grandes carencias en lo que se rifiere a material disponible, ya que algunos grupos, bandas y artistas no pueden colgar toda su discografía por motivos de diferentes poseedores de derechos de autor, motivados por cambios de sus discografías. Y algunos artistas ni si quiera aparecen, en la mayoría de los casos porque son poco conocidos, o porque su discográfica no ha llegado a un acuerdo con la empresa Spotify.

Otros artistas en cambio, están totalmente en contra de ceder sus creaciones musicales con la empresa sueca, como el caso de Coldplay, Black Keys o AC/DC. Algunos de los artistas que mencionamos aseguran que la plataforma no les ofrece óptimas condiciones de rentabilidad. Muchos incluso opinan que Spotify llega a mejores acuerdos con las grandes discográficas que con los artistas.

En España, la opinión de los artistas es muy similar, y aunque muchos prefieren permanecer en la plataforma, aseguran que los beneficios son muy reducidos: unos 0,007 € por reproducción de media, dependiendo de ciertas variables. De este modo, Tan solo artistas de gran renombre alcanzan los 100 € de ingresos mensuales a través de Spotify. El cantautor Álex Ubago lo explicaba recientemente del siguiente modo: “En la lista de conceptos de lo que cobramos, las cifras procedentes de Spotify a veces son tan pequeñas, con tantos ceros detrás de la coma, que las bases de datos de los ordenadores de la compañía de discos no las reconocen y todo se queda en el limbo. Creo que ya va siendo hora de que los músicos nos unamos para exigir transparencia con este asunto”.
Otros músicos afirman que sería necesario exigir que las retribuciones que les llegan vía streaming deberían ser más transparentes, ya que la opinan que no se está gestionando con claridad.

Por su parte, Spotify hace un llamamiento a la paciencia, y mientras tanto va emitiendo buenas noticias como la implantación en Alemania y Estados Unidos, próximos lanzamiento de aplicaciones, y resaltan que los usuarios de pago alcanzan más de cuatro millones.

Según los datos de un informe realizado desde la web de investigación tecnológica Gigaom, la empresa Spotify lo tiene pone muy complicado para ser rentable en un modelo de negocio donde las plataformas no pueden acudir a otros proveedores, ya que monopoliza los cuatro grandes sellos de la industria musical Universal, EMI, Warner y Sony. Además, se encargan de fijar los precios por el servicio y por ello obtienen parte de la propiedad de la empresa exigiendo el pago por adelantado, concretamente, Spotify les ha entregado más de 500 millones de dólares desde 2008. Las grandes compañías se defienden apelando al alto coste de los derechos y el numeroso de artistas con los que tiene que repartir los beneficios.

Por eso resulta poco creíble que según un informe del Cnet.com, se mostrara que solo en 2010 Spotify ingresó 97 millones de dólares, pero obtuvo un balance negativo de 37 millones. En 2011 los ingresos ascendieron hasta los 244 millones de dólares, pero las perdidas llegaron a los 59 millones.

Ante esta situación tan poco prometedora a corto plazo, algunas discográficas independientes, que naturalmente no disfrutan de los mismos acuerdos que las multinacionales, se han visto obligadas a retirar todo su catálogo de Spotify, en un intento de proteger los intereses de sus artistas, cuyos ingresos se ven muy perjudicados por el servicio. ST Holdings, empresa que alberga más de doscientos sellos discográficos, afirmó que estos servicios de música en streaming “vampirizan los beneficios”. Y en España, a principios de este año las opiniones entre los sellos independientes confirman más espantadas, puesto que no les llega prácticamente nada de Spotify, y económicamente no les compensa prácticamente nada.

El director de la agencia de management I´m an Artist, Juan Santaner, manifestó sentir “vergüenza” cuando comprobaba los ingresos que llegan de Spotify a sus artistas. Y tampoco alberga grandes esperanzas en el futuro de la empresa sueca: “Mi impresión es que no está funcionando, y también creo que más sellos retirarán su catálogo. Sinceramente temo por su futuro, creo que a lo mejor en unos años ya ni existe”, según comentó.

Y en el centro de tanta polémica, nos encontramos con la noticia de que en una de las listas de los personajes más ricos de la industria musical británica, aparecía Daniel Ek, fundador de Spotify, con 230 millones de euros en su cuenta. Lo que ha provocado las críticas de muchos artistas que se consideran “mal pagados”, mientras otros grandes cargos se llevan los beneficios. Concretamente, un músico necesitaría entre 50.000 y 60.000 o más en streaming para ingresar lo mismo que si vendieran sólo un disco en formato físico.

Así que por mucho que Spotify crezca en los próximos años, los artistas se resignan a continuar recibiendo la escasa retribución que les deja el streaming.

Fuente obtenida en ABC