Nota: Este post fue publicado originariamente en 2019, y ha sido actualizado para asegurarnos de que toda la información sobre la historia del marketing sensorial está al día.
Se dice que las personas recordamos de media el 1% de lo que tocamos, el 2% de lo que oímos, el 5% de lo que vemos, el 15% de lo que saboreamos y el 35% de lo que olemos. Para entender la historia del marketing sensorial, es necesario ahondar en sus orígenes y evolución.
No es la primera vez que hablamos en el blog sobre el marketing sensorial. Sin ir más lejos, recientemente explicamos que es uno de los distintos tipos de marketing experiencial que existen. Como vimos, el marketing sensorial busca despertar los sentidos del consumidor a través de una experiencia única y placentera. Así es como llegaremos a la mente y al corazón del consumidor para quedarnos.
Primeros pasos en la historia del marketing sensorial:
Curiosamente, el origen de la historia del marketing sensorial lo hallamos en una de las figuras más importantes de la filosofía griega. Fue en el año 367 a.C. cuando Aristóteles afirmó: “no hay nada en la mente que no haya pasado antes por los sentidos”. Una muestra temprana de lo imprescindible que se consideraban ya los sentidos a la hora de captar la atención de la mente, mucho antes de que el marketing naciera tal como lo concebimos ahora: una parte esencial del conjunto de estrategias empresariales.
Pero ¡ojo! No podemos decir que el concepto en sí se desarrollase y se utilizase en aquella época. En ese entonces no existían estudios ni técnicas que permitieran implementarlo.
La vista, el pistoletazo de salida en la historia del marketing sensorial:
Fue en la década de los 50 cuando comenzó a usarse como herramienta uno de los sentidos más eficaces que atraen la atención de un consumidor potencial: la vista. El sector de la publicidad y el marketing reconocen el 1950 como el año en que las primeras estrategias sensoriales a través de carteles, pósteres y mensajes visuales salieron a la luz.
Durante muchos años, el marketing se guió por la creencia de que la percepción visual lo era todo. Se cuidaba mucho el logo, los colores… Una táctica que funciona muy bien actualmente es la de usar pantallas en tu negocio que incentiven a los clientes y potencien la venta o conversión mostrando los productos.
En OriginalMusic estamos volcados con el marketing auditivo pero no somos nuevos… sabemos que la vista es el sentido estrella para el consumidor por eso, en nuestro reproductor Moski Pro, incluimos las funciones necesarias para poder gestionar todo el contenido visual y musical desde un mismo espacio.
Pero el consumidor tiene más sentidos y hay que trabajar en ellos. Por esta razón, se considera que la vista fue el sentido precursor de lo que hoy entendemos por marketing sensorial.
El oído, ritmos y sonidos como instrumento pegadizo:
Fueron muchos los años en los que todo giraba en torno al sentido de la vista. Con la llegada paulatina de la televisión a los hogares, el oído comenzó a tomar mayor relevancia. Muchas empresas se animaron a usar técnicas con canciones, dando lugar a spots de ritmos pegadizos que buscaban quedarse grabados en la mente de los usuarios.
Por eso, fue en la década de los 60 cuando los expertos afirman que se asentó el marketing auditivo en la publicidad. Hoy en día es sumamente importante escoger bien la música que suena en tu negocio. Cuidando este detalle, transmitirás las sensaciones idóneas y conducirás el comportamiento de compra hacia tu objetivo.
Si no quieres caer en errores a la hora de ambientar tu negocio musicalmente, confía en nuestros servicios de gestión musical para empresas y descubre todo lo que puede hacer por tu negocio el marketing auditivo.
El olfato, gran descubrimiento en la historia del marketing sensorial:
Es imposible entender la historia del marketing sensorial sin un sentido como el olfato, considerado el sentido más antiguo del ser humano. Pero, no fue hasta 1970 que empezara a usarse dentro de una estrategia comercial.
Dadas sus características, el olfato permite que todas las conexiones queden grabadas en la corteza prefrontal de nuestro cerebro. A partir de los años 70, las empresas más punteras comenzaron a aromatizar sus locales y productos como parte del ambiente para satisfacer al cliente y generar experiencias agradables.
El tacto y el gusto, los más tardíos en incorporarse al marketing sensorial:
Estos dos sentidos, los más rezagados, no comenzaron a considerarse como relevantes hasta los 90. El motivo de esto ha sido la dificultad para implementar estás técnicas en cualquier tipo de campaña.
Los expertos coinciden en que utilizar estrategias gustativas no siempre es fácil. En algunas ocasiones, no procedería o no sería viable su aplicación; parece raro utilizar el marketing gustativo cuando salimos del sector alimenticio o de bebidas. Las estrategias táctiles o hápticas también dependen mucho del objeto de la campaña, aunque siempre que sea posible incluirlas, actuarán como puente directo en la transacción.
El interesante estudio de Lindstrom:
En 2007, Lindstrom hizo el estudio de neuromarketing más costoso del mundo: un escáner mental a 2081 consumidores de diversos países sometidos a estímulos publicitarios visuales, olfativos y auditivos. Se controló la actividad cerebral, dilatación de la pupila, actividad sudorípara y movimientos faciales de cada uno y, se comprobó que, el 83% de la publicidad captaba sólo un sentido: la vista. Un error pues, para él, había que apuntar a todos los sentidos.
La efectividad estratégica de apelar a las emociones nunca se había medido. Tampoco la respuesta a estímulos sensoriales. Hasta entonces, los estudios daban por hecho que la publicidad se sustentaba en la consciencia y la razón. Pero el 85% de nuestras decisiones dependen del subconsciente. Para Lindstrom, cuantos más sentidos logres despertar, más llegarás al consumidor. Aseguraba, además, que para destacar en el mercado había que lograr que la gente identificase una marca sin ver su logo.
La interacción del público generada a través de los sentidos añadirá valor a la marca. No olvidemos que la finalidad principal y primordial del marketing es lograr un compromiso emocional con el consumidor para que la recuerde. Para ganarnos ese hueco en su memoria debemos tocar sus sentimientos, creando una historia con la que pueda identificarse y comprometerse.
Sea cual sea tu tipo de negocio es el momento de marcar la diferencia y lograr que te recuerden. Acércate a tus usuarios y diferénciate de tu competencia con Moski Pro; una herramienta que permite gestionar de forma centralizada y profesional la música que suena en tu local, además de las imágenes y vídeos emitidos a través de las pantallas. Contacta con el equipo de OriginalMusic y pide asesoramiento, la ambientación musical es un primer paso muy importante a la hora de tomar contacto con el marketing sensorial.
Y es que para desarrollar estrategias multisensoriales, no necesitamos llevar a cabo acciones para todos los sentidos. Muchas de las sensaciones generadas en un sentido se transfieren a otro. Un estímulo percibido a través de la vista puede provocar una sensación en el gusto o en el tacto por evocación de la memoria experiencial.
Esperamos que este repaso por la historia del marketing sensorial te inspire y te ayude a encontrar ideas perfectas para tu propio negocio. Porque al final, lo más importante es dejar huella.